La presencia de vehículos híbridos en España –aquellos que funcionan combinando el trabajo de un motor de combustión interna y otro que emplea la energía eléctrica procedente de baterías- es aún poco significativa.
En 2012, de los casi 700.000 turismos que se matricularon, sólo 10.030 fueron coches híbridos, es decir, un 1,4% del total. Aunque, pese a que la cifra es inferior a la del año anterior -10.350, es decir, un 3% menos- la proporción respecto a los vehículos tradicionales ha subido ligeramente desde 2011 dado que las ventas generales han descendido aún más.
No obstante, y según un estudio realizado en internet por AutoScout24, nueve de cada diez conductores estaría dispuesto a adquirir un automóvil de estas condiciones, pese a que el 70% reconoce no haberse sentado nunca al volante de un modelo híbrido.
La principal razón esgrimida por un 67% del millar de participantes de la encuesta para tan buena predisposición es que consideran que, a la larga, el menor gasto que se efectúa en carburante compensa la mayor inversión que debe realizarse en el momento de la compra.
Aunque, desde la propia AutoScout24, determinan que la creencia de que la adquisición de un coche híbrido supone un sobrecoste no es del todo cierta ya que, en muchos modelos, el precio se compensa gracias a las subvenciones de iniciativas como el plan PIVE -destinado a la renovación del parque automovilístico que, además, fomenta especialmente la compra de vehículos eficientes-
Por otra parte, destaca que casi un 90% de los encuestados confía firmemente en la seguridad y fiabilidad de estos modelos y no ponen en duda, por ejemplo, que exista algún tipo de inseguridad técnica con el sistema de baterías. Una afirmación que, tal y como especifican en el estudio, ratifican en base a que cada vez hay un mayor número de taxistas que apuestan por la tecnología híbrida.
Por último, parece que el sistema que se impone entre los conductores es el de vehículo enchufable –la primera opción para casi cuatro de cada diez conductores- por favorecer especialmente la realización de largos recorridos combinados con trayectos urbanos. De hecho, los fabricantes consideran que, a medio y largo plazo, acabará siendo el modelo más demandado.
Foto: Alquibilbo